domingo, 28 de septiembre de 2014

Atributos independientes en las descripciones


Un material o servicio puede tener muchos atributos, pero algunos pueden ser deducidos a partir de otros. Llamamos a tales atributos dependientes. Aquellos que no pueden ser obtenidos a partir de otros atributos, los llamamos atributos independientes.

Podemos modelar el atributo dependiente en función de los atributos independientes.

Un caso habitual se da cuando el material está sujeto a una norma de fabricación, Basta conocer la norma y las variables de entrada a las tablas que define la norma, para conocer las variables dependientes.

Decimos que un material está descrito en forma concisa, cuando se describe sólo con sus atributos independientes, evitando redundancia.

Sin embargo, para fines prácticos, en frecuente incluir atributos dependientes, y por lo tanto redundantes, tanto para facilitar la comunicación con usuarios, compradores o proveedores que pudieran estar familiarizados con la norma, así como porque para una cierta categorías pueden existir materiales fabricados bajo distintas normas o incluso bajo ninguna norma.

viernes, 26 de septiembre de 2014

La granularidad en los datos maestros

La granularidad, en el contexto de los datos maestros, se refiere al grado de detalle con que se define un registro o ítem del catálogo maestro. Si es muy detallado, hablamos de "bajo nivel", y si es agregado, hablamos de "alto nivel". De acuerdo a lo anterior, se hace posible establecer una jerarquía desde el más alto nivel al más bajo nivel, siendo la granularidad mínima, el nivel más bajo.

En un maestro de materiales coexisten simultáneamente distintos niveles de granularidad. Por ejemplo, un equipo, un componente de ese equipo, y un repuesto de ese componente. Pensemos, por ejemplo, en un notebook, el teclado del notebook, y una tecla determinada del teclado.  Como en el mercado, no se venden las teclas por separado, entonces no tiene sentido llegar hasta un nivel tan granular. O puede ser que sí se venda en el mercado, pero el costo es tan bajo que no vale la pena catalogar cada tecla por separado. Pero si mi negocio core es la reparación de teclados, y tengo cientos de reparaciones, probablemente sí valga la pena un nivel de granularidad lo más detallado posible. Dependerá de la relación costo beneficio de hacerlo.

Lo mismo ocurre con piezas de equipos rodantes, bombas, motores, válvulas, etc.

También no encontramos con los kits, donde, dependiendo de su valor, podríamos optar por descomponerlo en sus partes, catalogando cada una por separado y manteniendo la relación jerárquica. Hemos visto casos donde esto sí se hace, por ejemplo, en construcción, el kit sanitario (wáter en Chile, retrete, inodoro, etc.) de taza y estanque, se cataloga en forma separada, pues aunque se compra en forma conjunta, es habitual, en una constructora, consumirlo en forma separada, dada la frecuencia de roturas en la instalación.

En el caso de servicios, el problema de definir la granularidad es aún más complejo. Lo analizaremos en un siguiente post.